Vivimos en una sociedad que padece una baja inflamación intestinal generalizada. Sí, somos una población tan desconectada de nuestro cuerpo, que ni siquiera nos damos cuenta cuándo lo que comemos nos está sentando mal.
A menudo pregunto a mis clientas:
- ¿te parece que cuando comes ... te inflamas más de lo normal?"
La respuesta suele ser:
- Pues no lo sé, me fijaré la próxima vez.
O sea, vivimos tan desconectados de nuestro intestino que cuando nos inflamamos no nos percatamos, tenemos que hacer un ejercicio extra de atención para darnos cuenta. Y esto sucede no solo por la desconexión, sino porque vivimos permanente inflamados 🎈.
Cada vez me encuentro más en consulta el discurso de "me siento hinchada", y es que según vamos cumpliendo años las consecuencias de nuestra dieta se hacen más patentes, y hay un momento en el que tenemos la sensación de que "comamos lo que comamos" nos hinchamos.
Realmente no, no es "comamos lo que comamos", pero si es cierto que el cuerpo está muy intoxicado y reacciona con facilidad a cosas que antes parecía que no le hacían daño. En estos casos, es fundamental que decidas acompañarte por un especialista que pueda guiarte en el cambio, ya que no es "quitar por quitar" sino ir haciendo paulatinamente y reforzar con otros nutrientes.
Como estos síntomas empiezan a ser generalizados y más en mujeres a partir de los 40, he querido recopilar 3 alimentos que impactan negativamente en tu inflamación. Voy con ello:
🍭 SUGAR, BABY. El azúcar últimamente está en boca de todos. Pero parece que sigue preocupándonos más el hecho de que "engorde" que otras consecuencias mucho más graves. El azúcar (cualquier tipo: blanco, moreno, siropes, edulcorantes) activa los mecanismos de generación de insulina, lo que hace que nuestro cuerpo intente utilizar ese azúcar que entra como fuente de energía (aunque sorpresa! a veces no contiene energía) y que se sature de tanto azúcar. Porque comemos muchísimo más azúcar de lo que nuestro cuerpo tolera. La OMS recomienda no superar los 25g diarios de azúcar, y la media en España son 111 gramos, ¿has visto qué barbaridad? Esto es porque el azúcar está en todas partes: ultraprocesados, salsas, panes, pastas... ¡hasta en el jamón! ¿Qué efectos tiene el azúcar? Principalmente lo que sucede (y explicado de forma muy sencilla) es que nuestras células se saturan de tanto azúcar, empiezan a acumularlo en cualquier parte y esos trocitos de azúcar repartidos por el cuerpo nuestro organismo los entiende como "atacantes", no entiende lo que son y activa el sistema inmunitario para defenderse de ellos. La forma que tiene nuestro cuerpo de activar nuestro sistema inmunitario es a través de la inflamación, ¿te suena?
🥛🐄 TENGO UNA VACA LECHEEEERA. La leche cada vez está "peor" vista, y hoy vengo a explicarte por qué. La leche a nivel nutricional es escasa, no es que no aporte nada, pero las proteínas que tiene un vaso de leche también lo encontramos en un trozo de brócoli. La leche de vaca (algunos tipos de vaca, no todos) tiene una proteína (que no es la conocida lactosa) llamada Caseína α1, que es muy perjudicial para nuestro intestino. Dentro de nuestro organismo se transforma en una sustancia que activa nuestra permeabilidad intestinal (si no sabes lo que es aquí te dejo un video donde lo explico) y en conclusión, nos inflama. ¿Pasa siempre que tomamos leche? Casi siempre, y a partir de 2 lácteos de vaca diarios se empiezan a ver consecuencias (además de la inflamación), como heces sueltas, gases y adicción a los lácteos.
🍔 ULTRAPROCESADOS. Este tipo de alimentos suelen llevar (llevan) grasas malas, harinas refinadas y azúcares; o sea el combo perfecto para dinamitad tu intestino. Además, tu cuerpo no sabe interpretar las comidas con muchos alimentos, se pierde "despiezándolos" y activa la temida permeabilidad intestinal. Te animo a que reduzcas el consumo de este tipo de comidas a momentos muy excepcionales y que cuando lo tomes, lo disfrutes. No demonicemos comidas pero es importante saber las consecuencias que tienen dentro de nuestro cuerpo.
Además, quería puntualizar un tema sobre la inflamación. Porque pensamos que la inflamación sólo ocurre en la zona del vientre, pero no es así. La inflamación intestinal suele notarse al principio en la zona del vientre, pero poco a poco va expandiéndose y llegando a otras partes de nuestro cuerpo, ¡mucha atención a ese momento porque seguramente estemos llegando a una resistencia a la insulina que puede traer como consecuencia otras muchas patologías!
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